Se veía venir. Algo fallaba. El partido se mantuvo igualado, pero casi todo el tiempo a remolque para un Meridiano Antequera que no logró cuajar la defensa y además sufrió varias pérdidas de balón en los momentos clave. El Argüelles rugía, la afición asistente lo dio todo, pero faltaron dos goles para un triunfo que podría haber sido determinante en esta temporada. Quizás, la presión por puntuar traicionó a los chicos de Lorenzo Ruiz cuando más energía necesitaban.

Los vascos abrieron brecha en el inicio al imponer un parcial 0-3 que dejaba a los locales algo aturdidos y fue a partir del minuto 6 cuando empezaron a reaccionar. Anotaba Jesús López para empezar a reducir y seguidamente llegó el doblete de Bertos para empatar. Luis Castro, Francis Morales y Adrián Santamaría tomaron el mando en el ecuador de la primera mitad para no dejar que el Barakaldo se distanciara, a pesar de que la defensa antequerana no funcionaba.

A falta de un par de minutos para que sonara la bocina que anunciaba conclusión del primer acto y tras un tiempo muerto fantásticamente aprovechado por el técnico antequerano, dos goles de Francis Morales pusieron por delante al Meridiano (12-11) y, por si fuera poco, para rematar, Juanma Cabrera le daba al Meridiano la ventaja por dos tantos al descanso (13-11). Todo parecía que se había controlado en dos gloriosos minutos.

En la reanudación, el partido oscilaba entre el empate y la mínima ventaja para el conjunto visitante, que además atacaba fácilmente y casi todos los lanzamientos acababan en gol, tanto fue así, que en el minuto 40 la ventaja desfavorable al Meridiano era de tres tantos.

Los verdes despertaron y pusieron las tablas en el en electrónico (20-20) seis minutos después, que además de sobrellevar las exclusiones locales, lograron mantener el resultado a falta de 10 minutos para conclusión, pero no se conformaban con eso, porque Santamaría adelantaba al Meridiano y volvía la esperanza de presenciar un buen final.

Gritos de apoyo desde las gradas, un speaker que se dejaba la voz animando a los verdes en los minutos decisivos. Sólo faltaba la respuesta del equipo, que le llegara ese empuje que los suyos le estaban dando, pero el partido volvía a no pasar del empate y la tortura llegó cuando poco más de dos minutos para que se pusiera fin al envite, Nieto encajó el balón en la portería Antequera y el Meridiano no conseguía el gol. Lorenzo Ruiz reaccionó rápidamente solicitando el Tiempo Muerto, pero los verdes no levantaron cabeza en los segundos restantes y cayeron por un amargo 25 a 26.

REDACCIÓN LEONARDO RUIZ