En la primera carrera, celebrada a las doce de la mañana, hora local, Alviz efectuó una brillante arrancada, uniéndose al grupo de los más rápidos.
Desgraciadamente, en la cuarta vuelta se llevó un susto, al cerrársele la dirección en una frenada. Para evitar la caída tuvo que salirse de la pista, perdiendo contacto con sus predecesores.Pese a ello, recuperó el ritmo y llegó a rodar en sexta posición. En los últimos compases de la prueba fue superado por Rivas y Maurín al fallar en una frenada, terminando octavo.
En la segunda carrera volvió a arrancar bien y se fue con el grupo de cabeza. Su carrera estuvo marcada por el duro duelo que sostuvo con el galo Maurin. Tras no pocos intentos, consiguió superarle a falta de 7 vueltas para el final de la carrera. Desgraciadamente, para entonces el hueco que se había abierto con respecto al sexto era demasiado grande para plantearse continuar la remontada.
Ha sido un fin de semana muy positivo para mí –afirmaba el piloto al término de las dos carreras-. Era mi primera toma de contacto con el Team Basoli y su Kawasaki de Superbikes. También era la primera vez en el año que iba a usar neumáticos lisos, e incluso de calificación –tened en cuenta que en el Mundial de Superstock 1000 llevamos neumáticos de calle-. En la primera carrera me he llevado un buen susto y he decidido tomármelo con más calma y terminar la carrera. En la segunda me he sentido mejor y he mantenido un duelo muy divertido con Maurin para terminar séptimo.”
El dominador de ambas carreras fue el piloto del Team Calvo, Carmelo Morales, a bordo de una Kawasaki.
La próxima carrera del FIM CEV REPSOL se celebrará en el Circuito Ricardo Tormo de Valencia. Allí, Javi Alviz volverá a competir sobre la Kawasaki del Team Basoli.
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